Sabrás que aún cuento los días y como estés, donde estés, estás en mi vida
Que soy cruel con mis errores, eso lo sabes muy bien, muy bien me conoces.

Pero nunca sabrás lo que duele tu nombre, no pierdo la fe y te sigo esperando
Me siento así, como un niño perdido que no aprendió, no quiere jugar,
soñar o llorar, ni sonreír sin ti.

No soy quien soy si no te tengo, creo en las manos de Dios y no en este absurdo dolor!

Mirar el mar ya no sirve, no me da la clama, vivo del último beso que guardo en el alma...

Nunca sabrás lo que duele tu nombre, no pierdo la fe y te sigo esperando.
Y esta soledad que me sigue abrazando, se queda aquí, no se quiere ir,
Y no se qué hacer, ni qué decir!
Amor, aquí sin ti, no sé... no sé vivir.

No hay comentarios.: